Pueblos Indígenas y Afroecuatorianos

En Ecuador los pueblos y nacionalidades indígenas representan el 7% de la población, mientras que los afroecuatorianos representan el 7,2%. Estos dos grupos se encuentran en posesión de 7´500000 hectáreas de bosques, es decir, aproximadamente el 80% de la cobertura forestal del Ecuador.

Las siguientes son las nacionalidades indígenas del Ecuador: Achuar,  Awa,  Aí Cofan,  Chachi,  Epera, Huaorani, Kichwa de la Amazonía, Shiwiar,  Shuar,  Tsa Chila y  Sapara. A continuación, la lista de pueblos del país: Chibuleo, Kañari, Karanki,Kayambi, Kisapincha, Kitukara, Los Panzaleo, Manta Huancavilca Puna, Natabuela, Otavalo, Puruhá, Salasaka, Saraguro, Secoya,  Siona y Waranka.

De la totalidad de bosques existentes en el planeta, casi todos están habitados por comunidades indígenas y rurales, quienes han desarrollado formas de vida y conocimientos tradicionales que les ha permitido mantener una relación armónica con sus entornos, conservándolos por miles de años en buen estado.

Hoy por hoy los territorios de los pueblos y nacionalidades indígenas, así como las tierras de los afroecuatorianos se ven amenazados por varias actividades, entre ellas, la extracción petrolera, la extracción minera, los grandes monocultivos como la caña de azúcar, palma africana, teca, pino eucalipto, y la tala ilegal de bosques nativos para la obtención de madera. Todas las actividades mencionadas previamente vulneran los derechos de los nacionalidades y pueblos indígenas y afectan directamente a sus modos de vida.

Por otro lado,  el cambio climático, pese a ser generado principalmente por actividades realizadas en países desarrollados, afecta principalmente a países en desarrollo como Ecuador y sobretodo a poblaciones que dependen directamente de ecosistemas como el bosque, en este caso nacionalidades y pueblos indígenas y afroecuatorianas. Es importante recalcar que prácticas ancestrales como la agricultura y el manejo del bosque han permitido mantener el bosque en pie y además se han convertido en importantes estrategias de adaptación al cambio climático. Por lo tanto, la lucha por el respeto de sus derechos y de sus prácticas ancestrales son fundamentales para luchar contra la crisis climática.